Abriendo nuevos campos
Texto de Marta Baena
Fotografías de Carlos Linares
Revista Tambriz • nº 8
El campo ya no es sólo cosa de hombres y las mujeres se abren camino con paso firme en la campiña baenense. Tambriz bucea en la historia de las hermanas Salamanca Duarte, que emigraron a Barcelona a una corta edad y, después de tener su vida ya hecha, volvieron a Baena para convertirse en terratenientes y hacerse un hueco en un campo —nunca mejor expresado— en el que, hasta entonces, sólo se habían escuchado voces masculinas.
Carácter y mucho arrojo. Eso es lo que hace falta para ser el punto de inflexión en una tendencia arraigada. Encabezar un cambio no está exento de problemas, más bien todo lo contrario, son numerosos los obstáculos que hay que salvar para alterar las tradiciones enraizadas.
Hablamos de campo, hablamos de olivos, hablamos de tierra, sudor y mucho esfuerzo. A todo ello hay que hacer mención si queremos contar la historia de las hermanas María Manuela (Mariela) y Josefa (Fini) Salamanca Duarte, que reciben a Revista Tambriz en una mañana como otra cualquiera para dos mujeres que se han labrado su pasado, su presente y su futuro.