Cortijo Pascualico
Texto de Tania Abril
Fotografías de Ramón Bujalance
Revista Tambriz • nº 7
Esta casa es fruto del trabajo duro de Pascualico, un vaquero de San Andrés de Cameros (Logroño), que llegó a Baena buscándose la vida en 1840. La familia Prado, don Toribio, le acogió y tras muchos años de esfuerzo logró ahorrar y se ‘apañó’ una parcela de tierra, donde construyó el cortijo con la ayuda de esta familia. Pascual y su mujer no tuvieron descendencia, por lo que se trajo a su sobrino Lorenzo, abuelo de Juan Pérez, con tan solo 14 años. El joven volvió a San Andrés de Cameros y tras un tiempo, a Baena con su mujer. Los abuelos de Juan pasaron la vida en esta casa, donde nacieron sus tres hijos. En la actualidad el cortijo lo mantienen los nietos de Lorenzo en buenas condiciones, a pesar del paso de los años.