Texto de Tania Abril
Revista Tambriz • nº 5
La baenense María Isabel Moreno se lanza al mercado de la narrativa con su novela La única verdad. Tras la publicación de Papel en blanco (2017), en la que mezclaba poesía y prosa, la autora local sorprende ahora con una historia real de superación. Escrita en primera persona, con un estilo fresco y rápido sitúa a la figura paterna como hilo conductor de la novela, que capta pronto la atención del lector, que se embarcará en un proceso de duelo tras la pérdida de un ser querido. La trama arranca con un entierro.
Editada por Tambriz y presentada por el periodista, Manuel Piedrahita, y la concejala de Cultura, Lola Cristina Mata, La única verdad tiene mucho de la propia escritora, que dedica este primer libro a su padre. María Isabel Moreno asegura que esta novela «habla de sentimientos, de sensaciones derivados de mi experiencia, porque no puedo escribir sobre algo que no me mueva el corazón». Es más, «muchos pueden identificarse con los personajes y espero que sirva de consuelo para aquellos que viven un duelo», indica.
La única verdad desgrana con trazos sencillos la importancia del paso del tiempo, la familia y la amistad como puertos a los que amarrarse cuando uno se encuentra a la deriva. El olivar como telón de fondo y la naturaleza -una de las pasiones de la autora y que en el libro queda más que patente en diversas referencias como por ejemplo cuando sentencia que «la felicidad se encuentra en nuestra conexión con la naturaleza»- aparecen como escenarios de una infancia vivida en contraposición con la vida en la ciudad de la protagonista, que se refugia en el recuerdo para mantener vivo a su progenitor.
